Estas fechas navideñas son fechas de reuniones y comidas familiares, regalos y como no, muchas emociones viviéndose de forma más intensa de lo habitual, sobretodo para madres divorciadas o en proceso de divorcio con peques en casa.
Esta época del año puede ser particularmente desafiante, no sólo emocionalmente, sino también financieramente. La época de comprar regalos y tener las mesas llenas de comida pueden generar estrés financiero haciendo que la alegría de estas fechas tan bonitas pase a un segundo plano. Ahora bien, que eso no suceda está en tus manos.
Feliz Navidad para madres divorciadas
Es por eso que hoy quiero traerte una serie de consejos para que las navidades sean momentos bonitos de disfrute con tus hijos, con esa nueva forma de familia que habéis creado. Consejos que van más allá del típico: haz un presupuesto y decide cuánto te vas a gastar.
Y es por eso que te invito a olvidarte de lo material, del dinero en sí y centrarte en lo emocional, en regalar aquellas cosas que realmente quedarán en la memoria de tu peque. Y para ello es importante que recuerdes esta frase “el valor de un regalo no reside en su etiqueta de precio”.
Los peques, con su maravillosa inocencia y simplicidad, a menudo valoran más las experiencias y los recuerdos que los objetos materiales. Un regalo hecho con amor, tiempo y creatividad puede ser mucho más significativo que el juguete más caro en la tienda.
El mejor regalo de Navidad para tus hijos
Regálale experiencias, momentos para vivir juntos, que pueda disfrutar de ti, de tu compañía y sobretodo de tu presencia. Te puedo asegurar que eso no tiene precio. E incluso si tienes más de un peque en casa, haz días exclusivos para cada uno.
Y si los peques de la casa aún no saben quién es el verdadero Papá Noel o los Reyes Magos, es tan sencillo como hacer que ese regalo es tanto para ti como para el peque. Así incluso, te quitas ese “malestar” que puede ocasionar el hacerte un regalo a ti misma.
Recuperar la mágia de la Navidad
Recuerda, la comunicación es muy importante y más en estas ocasiones si queremos dar un enfoque diferente a los regalos. Habla abiertamente con tus peques sobre la nueva situación, explícales que esta Navidad podría ser diferente en términos de regalos materiales, pero que no faltará amor, cuidado y atención, es esencial. Este enfoque puede ayudarles a entender y apreciar el verdadero espíritu de la Navidad.
E incluso si queréis, podéis crear nuevas tradiciones. La familia se ha transformado así que puedes aprovechar para crear vuestras nuevas tradiciones como nueva familia que sois.
Hacer galletas, decoraciones navideñas, etc. Estas actividades no sólo son económicas sino que también fortalecen los lazos familiares y crean recuerdos duraderos.
Muchas veces nos centramos en el presupuesto y queremos gastar la cifra que hemos establecido cuando en realidad pueden existir cosas más económicas y mucho más emocionales y bonitas para tus peques.
Recuerda, lo que los peques valoran y recuerdan a largo plazo son los momentos felices compartidos, no el valor monetario de sus regalos.
Mantengamos vivo el espíritu de la Navidad enfocándonos en lo que verdaderamente importa: el amor, la unidad y la creación de recuerdos felices.
Este enfoque no sólo alivia la carga financiera sino que también enriquece nuestra experiencia festiva, haciéndola más significativa y alegre.
Felices fiestas!